domingo, 11 de noviembre de 2007

LA MIRADA DEL FELINO



Hay grafos como dagas
cercenando hierba donde pisan....Y, es
sinuoso su silbido,
el que crea esqueletos en la sombra
aun sin tocar siquiera
el sabor tangente de la espiga
ni su aura vertical evanescente. Pero,
de antiguo, son los carros griegos,
los que sobresalen en las cuádrigas
derramando el láser del colmillo
para una cosecha yerma de su máscara.

......... A ese territorio
circunscribe la logística, la mirada del felino
de jugada a corto o medio plazo. Después,
la quietud insomne en la isobara
de la cromatografía out de cualquier tinta.

Detesto emplear jamás, como delirio
o conclusión, en los discursos,
porque, en la bola de cristal,
las galaxias se suceden a sí mismas, y
es irrelevante un campo más o menos,
de devastación impenitente. Sólo es
que me duele la piel, cuando es el mío, y
me sangra la savia verde del cervuno.....
Verde manantial, verde queja,
abocado a la impotencia final
de un degradé en gris, hacia el olvido.
Del Libro: "RMN"

2 comentarios:

J. dijo...

Interesante texto.

Saludos.

Pilar Iglesias de la Torre dijo...

gracias Yose, por tu presencia

eres un cielo

un beso.......Pilar